La familia de los plátanos es muy amplia e incluye el banano que se cultiva en las zonas tropicales y que comprende desde pequeños bananos (como el guineo o colicero) hasta las de gran tamaño, como el verde o hartón.
Todos ellos muy atractivos por su sabor y versatilidad en la cocina, así como por sus cualidades nutritivas. Sus usos culinarios son espléndidos especialmente en sopas y cremas, aunque igualmente sabrosos como acompañamientos, postres y jugos.
De cualquier forma es el banano el más célebre de los plátanos y como suele ser un ingrediente en sí mismo, no se le cocina, mezcla o procesa con mucha frecuencia.
Propiedades curativas
¿Sabías que comer plátanos te da energía, pero a la vez te relaja? Aunque suene algo contradictorio es así y sucede porque contienen abundantes hidratos de carbono, que son fuente de energía, y porque son además la fruta más rica en vitamina B6, que entre otras propiedades refuerza el sistema nervioso.
También son muy ricos en potasio y magnesio, ambos considerados minerales esenciales para luchar contra el cansancio y subir tu ánimo.
Contienen vitaminas A, C y pequeñas cantidades de vitamina E, todas ellas con efecto antioxidante, que ayudan a disminuir los efectos negativos del estrés.
Propiedades curativas
¿Sabías que comer plátanos te da energía, pero a la vez te relaja? Aunque suene algo contradictorio es así y sucede porque contienen abundantes hidratos de carbono, que son fuente de energía, y porque son además la fruta más rica en vitamina B6, que entre otras propiedades refuerza el sistema nervioso.
También son muy ricos en potasio y magnesio, ambos considerados minerales esenciales para luchar contra el cansancio y subir tu ánimo.
Contienen vitaminas A, C y pequeñas cantidades de vitamina E, todas ellas con efecto antioxidante, que ayudan a disminuir los efectos negativos del estrés.
Simplemente versátil
Gracias a su sabor dulce y delicado, esta fruta goza de gran fama como complemento de muchas comidas.
Al desayuno, por ejemplo, es muy apetecido en compañía de cereales, en jugo y compota. Es una de las frutas favoritas de los niños y suele recomendarse para los bebés en etapa de destete.
Tanto en el almuerzo como a la hora de la comida, el banano tiene muchas aplicaciones. Crudo, cortado en trozos y agregado sobre las sopas, por ejemplo, enriquece los sabores y atrae a los miembros más pequeños de la familia.
También resulta agradable en tortillas, tortas y postres. Suele fritarse, aunque esta forma de cocción limita sus propiedades nutritivas, asarse (lo que resulta nutricionalmente más atractivo) o cocerse en leche, jarabes o mieles.
En las mezclas de frutas su sabor levemente perfumado resalta y complementa otros ingredientes más crujientes y jugosos como las naranjas y manzanas. También son un atractivo toque decorativo sobre los pudines.
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